Debemos estar reconciliados con Dios antes de que nos podamos reconciliar con otros. En El camino a la reconciliación, Neil T. Anderson invita al lector a que vea cómo Jesús lleva a cabo la transacción sobrenatural de la reconciliación cuando nos identificamos con su muerte, sepultura y resurrección. Podemos aprender cómo ir más allá de la gestión de los conflictos para llegar a la libertad y a sanar mediante el aprendizaje de los elementos básicos de la reconciliación: arrepentimiento, restauración y perdón. Con la ayuda de casos verídicos de personas que han alcanzado la reconciliación con Dios y de unos con otros, aprenderemos a identificar problemas en las relaciones, a encontrar soluciones efectivas y a orientar a otros por medio del proceso de una reconciliación genuina.