Seguro deseas esto para tus hijos y también que sigan a Dios. Pero ¿cómo lograrlo en estos días de apretadas agendas, actividades escolares, deportes, juegos de video, teléfonos cellares y la Internet? Lo primero es comenzar ya, ahora mismo.

Hoy es el día para que comuniques tu amor, tu fe y tus valores a tus hijos. No esperes un minuto más.

Con sabiduría bíblica y abundante aliento, la autora te ofrece en este libro ideas apropiadas y valiosas sugerencias para ayudarte a nutrir del Señor a tus hijos sin importar la edad que ha puesto en una posición privilegiada desde la cual tienes una influencia extraordinaria sobre la vida de otras personas. ¡Sé una madre conforme al corazón de Dios! Ayuda a tus hijos, no importa la edad que tengan, a experimentar el amor, las bendiciones y las provisiones de Dios.